Mi pareja es de Túnez y salió hace 10 años de su ciudad y no había tenido la oportunidad de volver.
Nos conocimos hace un año y el año pasado hablábamos de hacernos juntos un viaje a su país y otro a el mío. Yo nunca había estado en Túnez y me deba mucha curiosidad. Además ir con un local, es otro viaje diferente que ir por tu cuenta.
Planeamos Madrid y Túnez.
El primer viaje que hicimos fue a Madrid a conocer a mi familia y amigos. Estuvimos dos semanas que fueron geniales. Su primera vez en España y en Madrid. Todo salió perfecto. No hubo ningún contratiempo.
Bueno solo una visita de urgencia al dentista, pero mucho mejor que hubiera pasado en Madrid que en Paris. Los precios son mucho mejores y en mi opinión los dentistas más rápidos y eficaces.
Despues de que en Madrid pasamos unos días tan a gusto, rápido planeamos otro viaje y esta vez tocaba Túnez. Casi un mes a conocer a su familia y su país.
Empieza el viaje.
Dos días antes del vuelo, por motivo del numero tan elevado de contagios del Covid, el país decide tomar medidas más drásticas y una de ellas es que el que no vaya vacunado tiene que pasar una cuarentena de 10 días en una lista de hoteles indicado.
Yo estaba vacunada y no había problema , pero mi pareja, todo cabezón no quería vacunarse y no lo había hecho.
Aceptamos qué había que hacer la cuarentena y no cancelamos el viaje.
Nos pusimos en contacto con los hoteles pero no, no lo ponían nada fácil para hacer la reserva, nos decían que no estaban preparados todavía y decidimos ir al aeropuerto sin reserva, a ver qué pasaba.
Cuando llegamos al aeropuerto nos dicen que no saben qué va a pasar con nuestro vuelo, que no es seguro si saldrá o no. Estuvimos esperando tres horas hasta que al final se autorizó la facturación.
Durante la espera, el personal controló los documentos de PCR y vacunas y nos dijeron que sin vacuna necesitábamos una reserva de hotel, confirmada y pagada. Dijimos que sabíamos qué hoteles pero que no habíamos conseguido hacer el pago directamente con el hotel, pero que cuando llegáramos íbamos a ir directos. La chica, dijo: bueno, ya veremos qué pasa.
Por fin autorizan el vuelo y abren facturación y cuando llegamos a facturar las maletas, nos dicen que necesitamos la confirmación del hotel con la reserva pagada. Yo me quedo con cara de: ¿qué tengo que hacer? ¿cómo lo hago ahora mismo?. Estaba totalmente bloqueada y pensando que porque no lo había dicho antes claramente que habíamos estado tres horas en el aeropuerto y podía haberla hecho tranquilamente, pero no aquí de pie en el mostrador, sin saber como hago una reserva inmediata con confirmación de pago. Además éramos casi los últimos en facturar y ya solo quedábamos otras personas con el mismo problema y nosotros.
El tiempo se agotó y se cerró el vuelo.
Yo le digo al encargada del vuelo que: “como no lo dices ahora, en el ultimo momento después de haber estado tres horas mirando a las musarañas en el aeropuerto”. Me contesta: que: « como nos hacia pagar una reserva si no estaba seguro que saliera el avión ».
Resumiendo que al final cerraron vuelo y cómo no conseguí hacer la reserva no nos admitieron.
¡No, no me lo podía creer!
Yo me quedé sin habla, no podía creerme que no entráramos en ese vuelo después de haberlo planeado todo. Pensando, vuelta a casa y adiós mis vacaciones. Unas vacaciones que además necesitaba. Necesitaba, salir de Paris.
A mi pareja le salió ir hablar con la responsable del vuelo y le contó su historia personal. La chica debió de empatizar y nos dio la opción de un vuelo al dia siguiente sin ningún coste y nos ayudó hacer la reserva del hotel desde mi ordenador.
Hicimos la reserva a través de una web muy conocida en menos de 5 min. Fíjate si me lo podía haber explicado antes y no habríamos perdido ese vuelo.
Eran las 18h y el vuelo que nos había ofrecido salía a las 7am del dia siguiente, así que había que estar a las 5 de la mañana de nuevo en el aeropuerto, por lo que decidimos quedarnos y hacer noche.
No hecho muchas noches en un aeropuerto, pero puedo decir, que me parece bastante inhumano que no tengan condicionadas unas zonas de descanso nocturnas confortables. Todos los aeropuertos tendrían que tener unas buenas zonas de descanso pensando en los pasajeros qué tenga que hacer noche. Sería un gran detalle. Cuidar al cliente.
Preguntamos a un seguridad dónde podíamos quedarnos y nos indicó que había una zona para quedarse toda la noche y que había un Carrefour que estaba abierto hasta las 23h.
Hasta las 00h no estuvo mal la cosa. Con ordenador, internet, las tiendas abiertas, unos asientos no muy cómodos, pero no incomodos, unas cervezas y unas caladas a un porro de Marihuana que llevaba de casualidad hecho en la cartera, se pasó bien.
Pero las 12 de la noche nos dicen que cierran ese espacio y que solo queda abierto un pequeño espacio cerca de las puertas de entrada.
Un pequeño espacio que estaba casi completo, tuvimos que sentarnos en el suelo.
Había uno super preparado, con un colchón, almohada y saco de dormir.
El resto nos apañamos como pudimos.
Pasamos 3h sentados en el suelo, terminando la ultima cerveza que habíamos comprado y mirando Netflix.
Afortunadamente, a las 3h abrían de nuevo las zonas donde podías cargar los aparatos electrónicos y muchos mas asientos.
De 3h a 5am mi chico durmió y yo continue mirando Netflix, pasó rápido, menos mal!. Yo no tengo esa facilidad yá de dormir en cualquier sitio.
Con nuestra reserva de hotel y las tarjetas de embarque, nos dirigimos a facturar la maleta y cuando llegamos nos piden los documentos requeridos, de vacuna, PCR y confirmación pagada del hotel.
De repente mi pareja abre un correo de la pagina donde habíamos reservado el hotel y decía que la reserva estaba anulada. Buscando el mail de la reserva confirmada, no lo encontrábamos, me imagino que que por los nervios.
El chico de facturación me coge el móvil y consulta a la que debía ser la encargada del vuelo y esta intenta abrir la reserva desde mi móvil pero justo estaba en una zona que no tenía cobertura y no consiguió abrir la aplicación para ver la reserva.
Menos mal que yo llevaba otro teléfono que ese sí que tenia cobertura y me metí en los movimiento del banco y se veía reflejado que el movimiento estaba retenido. Como no entendían español, lo dieron como cobrado y nos dejaron pasar. Uffff.
Recuperamos el mail donde nos habían confirmado la reserva y con el pasamos los siguientes controles, que fueron dos más.
En el último control vieron que mi vacuna no hacía las dos semanas, faltaban tres días. Así que yo necesitaba tambien una confirmación de reserva de hotel. Menos mal que teníamos el mail de la reserva y estaba hecha para dos personas. Así que me dejaron pasar e ir a la puerta de embarque.
Por fin sentados en el avión.
El avión se supone que iba lleno, pero al final estaba ocupado solamente como un 30% de su capacidad. Con las nuevas restricciones de hacer una cuarentena, me imagino que mucha gente canceló. Podría ser la razón. No sabemos.
Por fin llegamos a Túnez sobre las 9h. Un vuelo de dos horas y parecía que habíamos ido a la otra parte del mundo, desde que habíamos salido de la casa el dia anterior a las 13h.
Cuando llegamos a Túnez, había un control nada mas llegar de la vacuna, PCR y un documento que se rellenaba digitalmente y se imprimía antes de salir de Francia. Nosotros íbamos con el documento antiguo del vuelo anterior que además llegábamos a diferente aeropuerto. Menos mal que no se dieron ni cuenta. Yo había entregado el de mi chico y él el mío y con ese lío de ordenarlos ya no miraron mas datos.
Comienza de nuevo el dilema de no estar vacunado.
Nos hacen enseñar la reserva del hotel. Ya todo esto comienza en su lengua, tunezino o tuneziano (no se cómo se escribe, lo siento) así que ya es Ahmed el que habla todo. Yo ya no me entero de nada!
Le dicen que tiene que ir al hotel a pasar la cuarentena.
Seguimos y llegamos a el control de policía. Le hacen bastantes preguntas de cómo salió hace 10 años del país, le piden incluso el pasaporte antiguo con el visado de salida. Menos mal que lo llevaba.
Pasamos el control, vamos a recoger maletas y aparece una persona que nos nos pide que vayamos con él en cuanto recuperaremos nuestras maletas, retirándonos los pasaportes. Nos acompaña a la salida para que cojamos un taxi y fuéramos directos al hotel.
Le decimos que no tenemos Dinares todavía y nos aconsejan cambiar.
Ahí entra Ahmed de nuevo a la terminal del aeropuerto y después de unos 15 min sale con dinero cambiado y con una tarjeta SIM y un conductor de taxi con nuestros pasaportes.
Yo me perdí que pasó ¿porque justo ese taxista? pero sin preguntar, me subí en el taxi.
Al subirnos al taxi, comprobamos la dirección y partimos. Yo no me quedé muy convencida.
Mi chico lo primero que hace, es poner la Sim y empezar a llamar a no se quien de la familia y yo no paro de decirle que no vamos bien, que antes de salir yo había mirado en google maps y no me cuadraba el tiempo que decía que tardamos y los kms. Pero él en su llamada, pasando de todo, le parecía en esos momentos más importante hablar por teléfono.
Ya cuelga y se ponen hablar él y el conductor y efectivamente, no íbamos al hotel donde habíamos reservado, nos llevaba a otro.
La policía había registrado el hotel donde nos llevaba el taxista, pero nosotros queríamos ir al otro por diferentes motivos. Igualmente nos llevó a ese hotel y llegamos al hotel y estaba completo. El taxista llamó a la policía y tuvimos que esperar a que nos autorizase para ir al otro hotel.
A todo esto, le digo a mi pareja si había preguntado el precio al taxista. Ni había consultado ni nada. Hicimos ahí las cuentas y nos hizo pagarle 50€. A mi me pareció mucho para ser Túnez, pero como no lo había hablado antes, te tienes que callar.
Típico de pardillos recién llegados a un país, para mi nuevo y para Ahmed era más la inexperiencia de no viajar y de no tener ni idea del precio de los taxis en su país.
Llegamos al otro hotel y el taxista con nuestros pasaportes y mi pareja, se van directos a la oficina del director. Ni idea de lo que hablan. Pero al salir, el taxista ya se marcha. Yo le extendí la mano, para despedirme dandole las gracias, pensando que todo estaba bien y cuando se marcha, me dice Ahmed que el taxista le había pedido más dinero, valoraba que había que pagarle más.
Vaya caradura. Después de un mes de viaje, de coger muchos mas taxis comprobamos que le pagamos demás. Pero bastante demás. Fuimos unos pardillos.
Ya se va el taxista habiendo dejado los pasaportes al director del hotel.
Ahí estábamos en el hotel, yo estaba super cansada de lo que llevábamos detrás.
La reserva estaba cancelada, nadie sabe porque, fué todo un misterio.
Yo no me enteraba de nada, entre ellos hablando en tuniziano y mi chico diciéndome que esperara que confiaba que nos íbamos hoy del hotel.
Ahmed les contó a todos su historia que llevaba 10 años sin ir por su país, que justo hacia dos meses que su padre había fallecido. Que con una PCR negativa hecha antes de salir, que no podía entender qué le dejaran 10 días encerrado, que nos dejaran, por lo menos, hacer la cuarentena en la casa familiar.
Parece que su historía les conmovió y de repente vino una mujer, como la encargada del hotel y nos dice que nos dan el permiso de irnos. Pero que tenemos que pagar tres noches de hotel, como sí las hubiéramos pasado.
Eso nunca lo llegaré a entender. Porque podemos irnos pero pagando tres noches de hotel. Para mí será un misterio. Para Ahmed es normal, así es Túnez.
Además dimos una propina a la mujer porque Ahemd dice que era lo correcto. Por habernos ayudado.
Los de las tres noches de hotel, me imagino que era para justificar si venía la policía que habíamos estado, pero que nos habíamos escapado quitándose ellos las culpas. Algo así, yo pienso!
Autorizados a irnos con nosotros pasaportes, nos fuimos a la estación de tren. Cuando llegamos eran como las 13h y el tren que teníamos que coger, salía como a las 19h. ¡No puede ser, más tiempo esperando!
Mi pareja llamó a un conductor de su pueblo que le había dicho su hermano, negociaron el precio por teléfono y vino a recogernos.
Estuvimos como unas dos horas mas esperando. Pero por fin llegó y nos condujo y nos dejó en la puerta de la casa de la familia.
Por fin llegamos!
Lo que gastamos el primer dia en los dos conductores, es lo que nos gastamos en tres semanas en taxis, autobuses y taxis compartidos. Los dos nos sacaron bien el dinero. Eramos turistas que veníamos de Francia.
La familia sabia que íbamos pero no sabia que llegaríamos ese día.
Mi pareja hacía 10 años y medio que se había marchado (ya lo he dicho varias veces ) y llegaba por primera vez desde entonces.
Se saltaban las lagrimas de ver la situación. Fue super emotivo. La madre y la abuela primero y unas horas más tardes las dos hermanas.
Por fin en Mahares!
CONTINUA…
